¿Qué significan el puente nasal bajo y el surco nasolabial liso? Una mirada al Síndrome Alcohólico Fetal

surco nasolabial liso

Al observar el rostro de un niño o una niña, ciertos rasgos pueden ser más que una cuestión estética. Algunas características faciales, como el puente nasal bajo y el surco nasolabial liso, pueden ser indicios visibles de una condición médica poco conocida pero con grandes repercusiones: el Síndrome Alcohólico Fetal (SAF).

¿Qué es el Síndrome Alcohólico Fetal?

El SAF es un trastorno del neurodesarrollo causado por la exposición prenatal al alcohol. Cuando una mujer consume alcohol durante el embarazo, incluso en cantidades pequeñas, puede afectar gravemente el desarrollo del feto. El SAF es la forma más grave dentro del espectro de trastornos del espectro alcohólico fetal (TEAF), e incluye alteraciones físicas, cognitivas, conductuales y neurológicas.

Entre los signos más visibles del SAF se encuentran algunos rasgos faciales característicos. Dos de ellos, que suelen pasar desapercibidos o no ser reconocidos como síntomas, son el puente nasal bajo y el surco nasolabial liso. Identificarlos puede ser clave para un diagnóstico temprano.

El puente nasal bajo: un rasgo característico del SAF

El puente nasal bajo hace referencia a una depresión más pronunciada entre los ojos, justo encima de la nariz. Aunque puede estar presente en distintas condiciones genéticas o étnicas, cuando se acompaña de otros signos como el surco nasolabial liso, debe considerarse la posibilidad de un diagnóstico dentro del espectro del SAF.

En el caso del SAF, el puente nasal bajo aparece como resultado de una alteración en el desarrollo facial durante el primer trimestre del embarazo. Su presencia es especialmente significativa cuando se combina con dificultades de aprendizaje, problemas de conducta o trastornos del desarrollo.

Surco nasolabial liso: más que una diferencia estética

El surco nasolabial liso es otra de las señales visibles del SAF. Se refiere a la ausencia o aplanamiento del pliegue natural que se forma entre la nariz y el labio superior. En niños con SAF, este rasgo suele acompañarse de un labio superior delgado y una expresión facial menos definida.

El surco nasolabial liso es uno de los criterios diagnósticos establecidos internacionalmente para el SAF, especialmente cuando aparece junto con el puente nasal bajo y otros signos craneofaciales. La identificación de este rasgo por parte de pediatras, logopedas, terapeutas y familias puede ser determinante para activar la ruta diagnóstica.

surco nasolabial liso

¿Por qué estos rasgos son importantes en el diagnóstico?

La importancia de identificar el puente nasal bajo y el surco nasolabial liso radica en su valor como señales de alerta. Muchos niños con SAF no son diagnosticados correctamente o reciben diagnósticos equivocados, lo que retrasa las intervenciones necesarias.

En combinación con otros factores como bajo peso al nacer, retrasos en el desarrollo motor o del lenguaje y problemas de atención, estos signos faciales pueden orientar a los profesionales hacia una valoración específica de TEAF.

El papel de las familias y los profesionales en la detección

Padres, madres y cuidadores deben estar informados de que el puente nasal bajo o el surco nasolabial liso no siempre indican un trastorno, pero sí justifican una evaluación más profunda si existen otras señales de alerta. La coordinación entre centros escolares, servicios sociales y profesionales sanitarios es clave para derivar a tiempo a las unidades de atención especializada.

Desde ASAFAD trabajamos para ofrecer información clara, acompañamiento y orientación a familias y profesionales que conviven con los efectos del SAF. La identificación temprana de síntomas como el puente nasal bajo y el surco nasolabial liso puede marcar una gran diferencia en la calidad de vida de quienes lo presentan.

¿Qué hacer si reconoces estos signos?

Si observas que un niño o niña presenta un puente nasal bajo o un surco nasolabial liso, especialmente si además tiene dificultades de conducta o aprendizaje, lo recomendable es acudir a un pediatra o neurólogo infantil para una primera valoración. También puedes contactar con asociaciones especializadas como ASAFAD, que ofrecen acompañamiento desde la sospecha hasta el diagnóstico y la intervención.

En muchos casos, las familias se enfrentan a un camino difícil hasta encontrar respuestas. Por eso es tan importante visibilizar síntomas como el puente nasal bajo o el surco nasolabial liso, que pueden parecer detalles menores, pero en realidad son piezas clave dentro de un diagnóstico complejo.

Avanzando en la sensibilización del SAF

Una parte esencial del trabajo de ASAFAD consiste en educar y formar a profesionales de diferentes ámbitos para que sepan identificar signos tempranos del SAF. El reconocimiento del puente nasal bajo y el surco nasolabial liso es un punto de partida clave en este proceso.

Además, el SAF no es solo una condición médica: es un fenómeno social, con implicaciones familiares, educativas y emocionales. Visibilizar rasgos físicos como el surco nasolabial liso o el puente nasal bajo ayuda a romper estigmas y a crear redes de apoyo efectivas.

ASAFAD: al lado de las familias desde el primer síntoma

En ASAFAD trabajamos para que ningún niño o niña con SAF quede sin diagnóstico o sin apoyos. Si tienes dudas sobre si el puente nasal bajo o el surco nasolabial liso pueden estar relacionados con el desarrollo de tu hijo o hija, te invitamos a contactar con nosotros.

Disponemos de recursos informativos, talleres, guías para profesionales y acompañamiento emocional para familias. Desde la detección hasta la intervención, estamos contigo.

Accede a todos nuestros servicios en: https://asafad.org/servicios/

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